domingo, 13 de mayo de 2007

TRIPTICO O LA DESOLACION DE RAFAEL

Autor: Joaquín Gómez.

Acto Primero.



Escena 1 (RAFAEL I - RAFAEL II – RAFAEL III)

(Cuando el público ingresa a la sala descubre, sobre un escenario fuertemente iluminado, a RAFAEL I sentado sobre un cubo de color rojo. Viste con un traje de color azul y un gran bonete del mismo tono sobre su cabeza. Más atrás, y subido a una escalera, está RAFAEL II con el mismo vestuario, solo que en un tono rojo. Por último y sentado en una silla sobre el proscenio, RAFAEL III, vestido de color gris y con el bonete en sus manos. Los actores permanecerán estáticos y con la vista perdida en un punto lejano durante toda la entrada del público. Una vez ubicado el último espectador, se bajarán las luces y quedarán solamente las necesarias como para crear un clima cálido en tonos ocres. Acto seguido RAFAEL II descenderá los escalones y dará un rodeo alrededor de RAFAEL I, regresará al punto de partida y desde allí le hablará. La voz de ambos actores será hecha por RAFAEL III hasta el momento en que RAFAEL II se quita el bonete. Por ende RAFAEL I y RAFAEL II en esta escena solo harán la mimesis. En esta escena RAFAEL III también se calza su bonete y así lo hará a lo largo de la obra cada vez que se represente una ficción)

Voz de RAFAEL III:

RAFAEL II: Hola! Hace mucho que esperás?
RAFAEL I : Que espero qué?!
RAFAEL II: Lo que esperás.
RAFAEL I : No lo sé.
RAFAEL II: Ah.... (Pausa. Luego los dos a la vez)
RAFAEL I y II: Yo soy... ( Se cortan. Silencio. Se miran largamente y se ponen de pie.)
RAFAEL I : Tardaste demasiado.
RAFAEL II: Podemos intentarlo de nuevo... si querés, digo.
RAFAEL I : No estoy seguro.
RAFAEL II: Nunca estuviste seguro de nada.
RAFAEL I : Vos tampoco.
RAFAEL II: Tenés razón. Lo intentamos?
RAFAEL I : Si. (Continúan mirándose un instante en silencio)
RAFAEL II: Tengo ganas de besarte.
RAFAEL I : Ahora no es el momento.
RAFAEL II: Y cuándo?! Es que ya no somos amigos?
RAFAEL I : No es el momento.
RAFAEL II: Ya no somos amigos...
RAFAEL I : No. Ahora no podemos, El...
RAFAEL II: (Abatido) Nunca lo fuimos...
RAFAEL I : Yo sí!
RAFAEL II: Cuándo?!
RAFAEL I : No lo sé. Una vez en el campo mientras me trepaba a un árbol -me gustaba treparme a los árboles- pensé en vos..., y te llamé: “- Rafael!, Rafael!...”, pero vos no estabas, no estabas...
RAFAEL II: Sabés una cosa? Estoy enamorado.
RAFAEL I : Nunca estabas.
RAFAEL II: (Insistente) Estoy enamorado, me oís?
RAFAEL I : (Lo mira sin interés) Siempre lo estás.
RAFAEL II: (Ansioso) Es cierto! Pero ahora lo estoy más que otras veces. Vos sabés lo que es el amor?
RAFAEL I : No.
RAFAEL II: Querés que te cuente como es?
RAFAEL I : No.
RAFAEL II: Pero, por qué ?!
RAFAEL I : No lo sé.
RAFAEL II: Bueno, mejor; no sabría decirte nada. Te voy a confiar un secreto, sabés? No estoy enamorado; nunca lo estuve en realidad.
RAFAEL I : Mhmm.
RAFAEL II: (Afectado) No tenés otra cosa para decirme que “mhmm”?!
RAFAEL I : Por qué?
RAFAEL II: Porque te mentí, porque te dije algo que no es verdad!!!
RAFAEL I : Ah. (RAFAEL III se quita el bonete)

Escena 2 (RAFAEL I – RAFAEL I)
RAFAEL II: (Alienado se quita el bonete) Basta. No! Esto se acabó! (Cambio de luces a tonos más claros)
RAFAEL I : (Sorprendido también se descubre la cabeza) Y ahora qué te pasa ?!
RAFAEL II: Que no sirve, así esto no vá! (Se dispone a bajar del escenario) Todo ha ido demasiado lejos y ni yo me lo creo!
RAFAEL I : (Cerrándole el paso evita que RAFAEL II descienda a la platea) Alto, alto un momento! Adónde vas?! Ni se te ocurra bajar!
RAFAEL II: Lo único que trato de hacer es innovar.
RAFAEL I : Innovar?! (Enfático) El teatro es una religión, y el escenario es su santuario, no otro; así que tenés que respetarlo y limitarte a ser lo que sos. Tu lugar está aquí arriba, no allí abajo; entendés? No hay que confundir al público con una mezcla de posiciones; aparte hoy en día lo que pretendés ya no es original. Se ha llegado tan lejos en las deformaciones que ya ni espectadores ni actores saben exactamente cual es su lugar. (A alguien del público) Y usted? Sí!, usted! Qué piensa que nos mira con esa cara de espanto como diciéndose a sí mismo que no entiende nada?!
RAFAEL II: Calma, calma.., el que tiene que controlarse ahora sos vos; no te pongas nervioso.
RAFAEL I : Es que nos están juzgando! Con qué derecho eh?; con qué derecho pretenden entendernos si no saben nada de nosotros? (Al espectador) Porque usted señor no sabe nada, absolutamente nada de nuestro pasado; solo vino a disfrutar un rato y después, después se irá por ahí, a cenar tal vez con sus amigos sin preocuparse ni siquiera un poquito por estos actores que renuncian a todo, que se desviven con tal de que al menos este momento sea eterno.
RAFAEL II: Pero él tiene derecho, es un espectador y -al igual que el resto- pagó su entrada y tenemos que ofrecerle un espectáculo; es nuestro deber.
RAFAEL I : Pero eso no los habilita para que nos abran un juicio! Por qué todo lo que hacemos tiene que tener un significado?! Hay gente que estudia cada signo para analizar desmenuzadamente nuestra historia, y se olvida así del todo. Hay que rescatar lo bello, lo puro; sin que importen esos significados ocultos que no hay.
RAFAEL II: Estás confundido (Sonido de platillos que chocan entre sí)
RAFAEL I : Sí! Sí! Estoy confundido! Vos, ellos... todos me confunden. Yo amaba algo, algo que perseguí durante años y que se fué desvirtuando poco a poco. Abrí demasiadas puertas a la vez, y cuando intenté entrar por ellas, supe que yo era uno solo, y que me aguardaba nada más que una puerta de las tantas que había abierto; fué entonces cuando comenzó este miedo, este pánico a que del otro lado no hallara lo que buscaba con tanta ansiedad porque ya no podía reconocerlo... porque ya no sabía que era en si lo que buscaba... Ahora, ahora estoy parado en donde convergen todas esas puertas que me esperan semiabiertas, que me desafían de una manera terrible a que las atraviese, son como fauces babeantes que se mofan de mi debilidad, y largan sus grotescas carcajadas al verme tan susceptible de todo, tan desvalido...

Escena 3 (RAFAEL III – RAFAEL II – RAFAEL I)
RAFAEL II: (Tratando de romper el efecto se dirige al público. Voz de RAFAEL III) Estimado público. Damas y caballeros aquí presentes, les ruego que disculpen esta... cómo explicarlo? ...confesión, sí; desafortunadamente llegaron en un mal momento. Seguramente hubo un error ya que ustedes no deberían de estar aquí, ni tendrían que presenciar esta ventilación de nuestras intimidades ni soportar la pasada mal representación de la obra que estamos ensayando. Indudablemente alguien tergiversó los horarios y obtuvo como resultado la accidental presencia de ustedes en una jornada que no estaba dedicada a función sino a los ensayos; fue esta circunstancia la que nos obligó a mi compañero y a mí a improvisar lo que vieron hace tan solo unos minutos. Nuevamente les pido nos disculpen y sobre todo que entiendan que a fuerza de trabajar con los sentimientos -por sobre todas las cosas- uno se vuelve un poco tonto y habla más de la cuenta (RAFAEL III se quita el bonete)
RAFAEL I : Eso no es cierto! No tenías porqué disculparte! Yo solo quería que supieran mi verdad!
RAFAEL III: Cuál verdad?!
RAFAEL I : Nuestra verdad!
RAFAEL II: Cuál verdad?
RAFAEL I : La de mi real identidad! Quiero que sepan que yo también tengo una vida anterior y paralela a lo que estoy haciendo aquí ahora. Necesito que me entiendan... que me ayuden y no me exijan tanto... A veces no puedo separar las cosas, me resulta difícil... me confundo y llega un punto en el que ya no sé quién soy o de que lado me encuentro... (Comienzan a girar enfrentando diagonalmente sus cuerpos y parlamentos.)
RAFAEL II: Es lógico que un escritor se inmiscuya en sus historias, porque en definitiva son parte de su esencia.
RAFAEL I : Y un actor?
RAFAEL II: El actor sabe poner barreras donde corresponde.
RAFAEL I : (Riendo con sarcasmo) Estás seguro?
RAFAEL II: Por qué dejaste de actuar?
RAFAEL I : Cuándo empezarás a escribir?
RAFAEL II: Me asustás.
RAFAEL I : Es que hay acaso un límite para el amor? Hay una explicación? Se puede decir soy escritor porque dejé de actuar?
RAFAEL II: Seguramente una de las dos cosas tuvo más peso para vos.
RAFAEL I : O alguna de ellas me asustó.
RAFAEL II: Vés que sin quererlo vos también estás buscando un análisis?
RAFAEL I : Análisis, análisis... Por qué no dejás de atormentarme con los análisis?! Qué querés saber? Hasta donde pretendés llegar?! Por qué?! Por qué insisten en limitarme la vida?!
RAFAEL II: Quién?
RAFAEL I : Vos!, Todos! Todos cuestionan lo inexplicable, lo mágico... Y después de todo si es mi historia qué?! (Va hacia proscenio, RAFAEL II lo observa desde atrás) Alimentan su curiosidad morbosa indagando acerca de cómo es el escritor, si se descubre por aquí o por allá, qué quiso decir con esto, qué con aquello: Basta!, basta ya no lo aguanto! Quieren saber como es un escritor? Está bien; yo se los voy a contar (suenan los platillos). El escritor es un ser inconformista que busca la perfección en aquellos lugares en donde no la encontrará jamás; pero no declina. Sufre, se revienta las sienes contra los logros a medias pero aún así continúa exigiéndose porque presiente que él puede conseguir mejores resultados; y saben por qué?, simplemente porque él ve otra dimensión. Es consciente de que sus sueños jamás serán satisfechos íntegramente. El cree en algo superior, lo ve, lo palpa, se desespera; pero la realidad es demasiado limitada para su imaginación. Es un visionario que aventura respuestas a preguntas todavía no formuladas.
RAFAEL II: Creo que nunca me atrevería a escribir.
RAFAEL I : Te creés distinto a mí?
RAFAEL II: Al menos no me exijo tanto.
RAFAEL I: No, no te engañés; el escritor y el actor son hermanos siameses, difícilmente sobreviven el uno sin el otro. Yo no puedo escribir todas las historias ni vos ser todos los personajes, sencillamente porque no somos inmortales.
RAFAEL III: Creo que la gente se aburre.
RAFAEL I : No les viene mal conocernos un poco, es lo que en el fondo ellos querían saber.
RAFAEL III: Se merecen más acción.
RAFAEL II : Vinieron para ver teatro, para volar un momento y olvidarse de sus problemas.
RAFAEL I : Y pensás que no lograron su objetivo? Dudo que alguien ahora esté recordando el alquiler o el teléfono que hay que pagar. Acaso es culpa nuestra que se metieran al teatro un día en el que no hay función?!
RAFAEL I I: Ese no es el caso. Somos actores y tenemos que comenzar a actuar.
RAFAEL I : (Pausa. Sentido) Por qué? Por qué lo dijiste? Hubiera sido mejor guardar el secreto.
RAFAEL I I: Qué secreto?
RAFAEL I : El misterio.
RAFAEL III : La magia del incomprensible absurdo. (A partir de aquí el diálogo comienza a hacerse más lento)
LOS TRES : El absurdo no existe. Siempre hay algo detrás de cada cosa.
RAFAEL I : Todo es tan contradictorio... (Se abandona sobre el cubo)
RAFAEL II: Por qué?
RAFAEL I : No lo sé.
RAFAEL II: Qué pasa Rafael?
RAFAEL I : (Mirando el suelo, los brazos caídos y con expresión de vencido.) Me perdí a mi mismo Rafael (Leit motiv de platillos.) No sé dónde quedó aquél adolescente soñador... Siempre viví a destiempo, siempre creí haber nacido en un lugar equivocado; un intruso en el siglo con visiones y nostalgias del pasado, de un pasado olvidado, no vivido...
RAFAEL II: Estás temblando...
RAFAEL I : Quién soy?
RAFAEL II : Quién soy?!
RAFAEL III: Quién soy?!
RAFAEL I (Convulsionado) Me desconozco, me extraño a mi mismo, al que fuera; y toda esta vieja juventud que cerca con su carga a mis huesos no basta para contentarme. Necesito algo..., algo; pero qué? Nunca supe que era... Intenté miles de cosas, quise ser montones de hombres escapándole a los hombres y fuí actor. Amé como mis personajes, odié tanto y sufrí aún mucho más que todos ellos juntos y fuí escritor... pero todo me pareció tan falso (Gritando hacia la platea se incorpora bruscamente enfrentando al público como esperando una respuesta.) Dónde está la vida?! grité, pero nadie pareció escuchar mi alarido que se perdía en el silencio; ni siquiera me veían, solo caminaban presurosos esquivándome (Baja la cabeza, colgados los brazos de unos hombros vencidos. Imagen de derrota.) Y regresé a casa como todos los domingos -vacío y cansado- de andar esas calles que no me llevaban a ninguna parte. (Se refugia en RAFAEL II presa de sollozos.) Oh, es terrible, es terrible...
RAFAEL II: Bueno, bueno ya pasó; todo eso ya se oculta en el pasado...
RAFAEL I : Pero está latente; siempre estará conmigo.
RAFAEL II: Ya vas a ver como todo se olvida.
RAFAEL I : Cómo podés saberlo?
RAFAEL II: Lo sé, simplemente lo sé y eso es lo que importa.
RAFAEL I : Si, eso es lo que importa.
RAFAEL II: Comenzamos el ritual?
RAFAEL I : Ahora?
RAFAEL II: Y por qué no?
RAFAEL I : No lo sé.
RAFAEL II: Te asusta?
RAFAEL I : Tal vez.
RAFAEL II: No tengas miedo.
RAFAEL I : Por qué?
RAFAEL II: Nada va a pasarnos.
RAFAEL I : Cómo podés saberlo?
RAFAEL II: Lo sé, simplemente lo sé y eso es lo que importa.
RAFAEL I : Si, eso es lo que importa.
RAFAEL II: Empezamos?
RAFAEL I : Ahora?
RAFAEL II: Sí, ahora.
RAFAEL I : Será tu decisión.
RAFAEL II: Nuestra decisión.

(Se miran largamente en silencio. RAFAEL II se coloca el bonete y observa a RAFAEL I que hace lo propio con el suyo. Se bajan las luces para crear un clima apropiado. A medida que RAFAEL III emite su texto, RAFAEL I va corporizando sus acotaciones. Lo mismo ocurrirá con RAFAEL II cuando le toque el turno. Se hará hincapié en la expresión corporal de los actores y en la diferenciación de voces de RAFAEL III )

Escena 4 (RAFAEL III – RAFAEL II – RAFAEL I. Voz de RAFAEL III)
RAFAEL II: Rafael se levanta y acercándose lentamente a Rafael camina hacia el centro del escenario. Se detiene. Se sienta en el suelo, y al cabo de un momento comienzan a bajarse las luces. Se propaga una música suave al tiempo que el actor expresa con su cuerpo las emociones que -activadas por la melodía- van impulsando a cada uno de los músculos de su cuerpo. Paulatinamente va relajando sus miembros que tienden a esparcirse por el espacio. Se siente volar. Su organismo es cada vez más liviano y libre. Es el primer hombre en el mundo. Se desprende de las ropas que cubren su torso y regresa nuevamente a Rafael... (Continúa la acción sin que medie la pausa.)

RAFAEL I : …Que comienza a quitarse su chaqueta para recorrer su piel investigando cada parte de su cuerpo lentamente, muy lentamente. Respira profundo llenándose del aire fresco que lo envuelve. Todo es nuevo y agradable. Abre los ojos y el sentido que ahora descubre lo impulsa a avanzar y a indagar el entorno. El placer es infinito y novedoso; desea abarcarlo todo, conocer más... investigar... Un escosor palpitante se despierta desperezándose en su abdómen. Se expande, puja insistentemente y asciende por su pecho provocándole escalofríos; es la palabra que acaricia a su esófago y con delicados soplos lo invita a abrir la boca para besar el aire y pintar con sonidos el silencio.

RAFAEL I:
Me aventuro siguiendo un rastro de palabras;
lento, paso a paso te fabrico sin verte.
Imagino tu cuerpo, tu rostro, tu frente,
tu mirada profunda, tu aliento, tus sombras...

RAFAEL II:
Me escurro como el agua enfundado en tus formas.
Lleno tus espacios, me repliego en tu cauce
de rio turbulento -que al desbordar produce-
la comunión de dos seres que unen sus almas.

AMBOS:
Y apadrinados por el aüra de la mística de
un sueño, que perpetúa tu alma en mi plástica
orgánica, escapamos -cómplices- del mundo.

Y en la titánica evasión nuestras estelas,
proyectan sus voces de magia a las estrellas;
que agradecidas se alzan y aplauden con ansias. (Se quita el bonete)

(Al terminar de declamar el soneto, ambos actores se quitarán sus bonetes y se separarán algo intimidados. Se encienden el resto de las luces.)

Escena 5 (RAFAEL II – RAFAEL I)
RAFAEL II: Pensás que El estaría de acuerdo con todo esto?
RAFAEL I : Qué es todo esto?
RAFAEL II: Los cambios (Toma su chaqueta y se la coloca.)
RAFAEL I : (Mientras se enfunda la suya.) Diremos que se trata de una adaptación experimental de la obra dé, afectada a activaciones psicosomáticas con el objeto de propagar nuevas tendencias que shockéen al estado aletargado del teatro en estos tiempos.
RAFAEL II: (Asombrado) Ohhh... Rafi, pero por qué no me dijiste que lo que estábamos preparando era tan importante?
RAFAEL I: No es importante, sino que con estas afirmaciones pareceremos importantes y cualquier error sería acusado de novedad. Dónde está la ropa? (Estudia el escenario mientras RAFAEL II lo sigue.)
RAFAEL II: En los camarines... Pero oíme... ahora que lo pienso, lo que decís es muy interesante; debemos verlo de esa manera! Sí! Es necesario trabajar sobre ese punto.
RAFAEL I : El vestuario lo depositaremos en un cajón grande, o mejor en un amplio baúl, aquí en el centro del escenario; que a su vez nos servirá de escenografía. Sí! Eso es... ya puedo verlo...
RAFAEL II: Yo también puedo ver las primeras planas firmadas por los más prestigiosos críticos! (Con ademanes exagerados) “Desconocidos histriones del siglo XXI logran activar la llama sagrada con magnífica propuesta...” ahhh...
RAFAEL I : Traéme el sobretodo, vamos a empezar con esa parte. Yo voy a buscar un baúl que ví tirado cerca de los baños; con unos arreglos puede llegar a servirnos.

(Mutis de ambos por lados opuestos. Al momento reaparece RAFAEL I arrastrando un baúl que llevará por todo el escenario buscando una ubicación que no encuentra. Instantes más tarde ingresará RAFAEL II cubierto por una pila de vestidos de época, sombreros y accesorios. Al entrar tropieza y se cae, junta unos trajes y se le caen otros. RAFAEL I vuelve a arrastrar el baúl.)

Escena 6 (RAFAEL II, RAFAEL I)
RAFAEL II: (Arrojando al suelo todo lo que traía mira contento a RAFAEL I.) -Esto es todo lo que pude rescatar.
RAFAEL I: No era necesario traerlo todo, lo único que precisamos por ahora es el sobretodo.
RAFAEL II: (Esquiva y temerosamente) Es que... no está.
RAFAEL I : Cómo que no está? Lo buscaste bien?
RAFAEL II: Lo... lo olvidé en casa.
RAFAEL I : Qué?! Lo olvidaste en casa? Y por qué lo llevaste?!
RAFAEL II: Porque tenía frío... Te acordás del ensayo anterior? Hacía un frío terrible a la salida, y lo llevé puesto.
RAFAEL I: Imbécil! (Amenaza con pegarle. RAFAEL II se cubre) Y ahora qué hacemos?
RAFAEL II: Perdonáme Rafael, perdonáme por favor. Te juro que no quise hacerlo! Voy a buscarlo corriendo eh? Puedo hacerlo tengo buenas piernas; en poco tiempo estaré de vuelta, eh? Querés que vaya, eh?
RAFAEL I : No! Ahora ya está. Obviaremos esa parte por ahora; tomemos el discurso. A ver vení subite acá arriba. (RAFAEL II se trepa a baúl, RAFAEL I va a foro y observa) Pero no te parés así, parecés estúpido; postura Rafael, elegancia, garbo... No, no ahí no va... a ver bajáte. ( Se acerca y cambia de lugar el baúl volviendo a recorrer el escenario haciendo subir y bajar a RAFAEL II de la tapa, hasta llegar al lugar de donde partieron para elegir finalmente ese sitio. RAFAEL I se aleja y lo mide con las manos y opta por el.) Sí! Acá se ve espectacular; este es el sitio clave. A partir de acá trabajaremos la escena.
RAFAEL II: Sí! Yo también lo veo así; aquí me siento particularmente bien. Más que bien... sumamente cómodo... Es más creo que el baúl en el centro -ahora que lo pienso- es muy innovador; e incluso diría que se vé hasta algo transgresor. (En un impulso salta del baúl y se abraza a RAFAEL I ) Ohh Rafito, sos tan inteligente! Estoy seguro de que con esta puesta pasaremos a la historia! (Pausa. Intrigado al observar a RAFAEL I que busca algo) Pero, qué buscás?
RAFAEL I : Una tiza.
RAFAEL II: Una tiza? Y para qué querés una tiza?
RAFAEL I : Para marcar el sitio exacto.
RAFAEL II: Pero eso no es necesario, será fácil acordarnos que el baúl va ubicado acá en el centro.
RAFAEL I : No entendés nada! Este es el lugar exacto; si lo movemos un centímetro más a la derecha, o un centímetro más a la izquierda, o un centímetro hacia atrás, o hacia adelante, rompemos el efecto que le queremos dar a la situación, comprendés ahora?
RAFAEL II: Claro que lo entiendo. Está muy claro no es verdad? Ese efecto es indispensable. Voy a casa a buscar el sobretodo?
RAFAEL I : No! Te dije que íbamos con el discurso..; es que tengo que repetirte todo?
RAFAEL II: Oh si es cierto... Disculpáme Rafael, es que me siento un poco culpable por mi olvido -eso es todo- lo siento (RAFAEL I brevemente conmovido lo atrae hacia si y lo besa dándole palmadas para tranquilizarlo.) - Rafael!
RAFAEL I : Qué pasa?
RAFAEL II: Me besaste...
RAFAEL I : Si, qué tiene de raro?
RAFAEL II: Cómo que tiene de raro? El pudo habernos visto.
RAFAEL I : Quién?
RAFAEL II: El.
RAFAEL I : El? Imposible; cómo podría?
RAFAEL II: No lo sé! Sabés como es El; todo lo ve, todo lo adivina... por favor Rafito, no vuelvas a hacerlo.
RAFAEL I : Pero Rafael, hasta cuando vamos a seguir así?
RAFAEL II: No sé, no sé ya pensaremos en algo; pero por ahora prométeme que no volverás a besarme sin que yo esté preparado.
RAFAEL I : Está bien, no te preocupés... está todo bien; vamos a trabajar la escena.
RAFAEL II: (Infantil) Sí! Qué bueno! Hagamos el discurso (Salta batiendo palmas como un niño feliz.)
RAFAEL I : No es hacer el discurso Rafael, él solo da el clima pero nada más. Nosotros en cambio solo corporizaremos a un producto de consumo; captás?
RAFAEL II: Oh si claro que entiendo; se trata de la actividad psico-somática.
RAFAEL I : Si algo así, algo así... Bueno comencemos; voy a poner el sonido de las masas y vos mientras tanto andá vistiendoté (Va a colocar el disco pero a mitad de recorrido se vuelve hacia Rafael II que, sumergido en su mundo, escruta las ajadas telas de su vestuario). Rafael...
RAFAEL II: Qué pasa Rafi?
RAFAEL I : Nada... solo.., olvidá todo lo que dije hoy; fue un mal momento y no volverá a repetirse.
RAFAEL II: Hiciste bien en confiar en mi. Me sentí muy bien, importante.
RAFAEL I : No volverá a ocurrir. No podemos ir por ahí contando todo lo que nos pasa, debemos ser fríos y distantes.
RAFAEL II: Fríos y distantes?
RAFAEL I : Sí! Escépticos.
RAFAEL II: Pero Rafael cómo...
RAFAEL I : (Cortante y marcando acentuadamente cada palabra) Fríos. Distantes. Escépticos. (Autoritario) Repetílo!
RAFAEL II: (Sumiso) Distantes y escépticos...
RAFAEL III: Autómatas.
RAFAEL I : No lo olvides.
RAFAEL II: (Autómata) Autómatas... no lo voy a olvidar.
RAFAEL I : (Se acerca a RAFAEL II y lo besa) Voy por el disco (Se va)
RAFAEL II: (Para si) Fríos y distantes...

(RAFAEL I se acerca al cubo que contiene al fonógrafo, ubicado cerca del proscenio hacia la derecha, coloca el disco y se escucha la voz de una multitud que aclama a un líder –en este caso a Levin-. Mientras tanto RAFAEL II empieza a caracterizarse. RAFAEL I vuelve junto al baúl para realizar la misma tarea. Cuando terminan de vestirse, RAFAEL I hace subir a RAFAEL II sobre el baúl; que adoptará una posición escultórica evocando con ingenuidad y cierto aire nostálgico la elegancia de los viejos cómicos, como si con esta acción desempolvara una vieja fotografía, al tiempo que RAFAEL I gira en torno a él. De pronto RAFAEL II comienza a lloriquear y -frotándose los ojos- se sienta sobre la tapa del baúl.)

RAFAEL I : Y ahora qué te pasa?
RAFAEL II: (Entre lloriqueos) Es que... es que esas voces... me conmueven hasta las lágrimas Rafi... no puedo... evitarlo... Sería posible buscar a otras?
RAFAEL I : Imposible! Estas son las indicadas indefectiblemente!
RAFAEL II: Intentemos con otro discurso entonces, no puedo evitar llorar con este.
RAFAEL I : Tenés que controlarte. De todos modos no está mal esa emoción; es más si lograras reprimirte un poco, le darías incluso más fuerza al personaje.
RAFAEL II: Pero es que eso me hace sufrir!
RAFAEL I : No se habla más del asunto! Te reprimís y listo! Vamos, vamos otra vez; subíte al baúl que pongo nuevamente el disco.

Escena 7 (RAFAEL II – RAFAEL I – RAFAEL III)
(RAFAEL II obedece y -una vez arriba- se coloca el bonete. Se escucha de fondo a una multitud mientras RAFAEL III comienza a emitir su discurso a las masas.)

Escena 8 (RAFAEL II – RAFAEL I)
RAFAEL II: Basta! Basta! Ya no quiero escucharlos más. (Se quita el bonete.)
RAFAEL I : Silencio!
RAFAEL II: Por favor, es que no puedo soportarlo!
RAFAEL I : Por Dios (se quita el bonete) Dejá de chillar y concentráte!
RAFAEL II: No puedo, no quiero volver a recordar aquello... No voy a resistirlo otra vez...
RAFAEL I Estás actuando Rafael; esto no es la vida, estamos fingiendo!
RAFAEL II: No, no! Vas a matarme del disgusto! Todos los días tengo que revivir mi fracaso; todos los días vemos como cada uno de nuestros sueños se dispersan por el aire como fuegos de artificio.
RAFAEL I : (Se coloca el bonete) Rafael! Tu bonete!
RAFAEL II: No voy a ponérmelo!
RAFAEL I : El bonete Rafael! No me obligués a...
RAFAEL II: Hacélo, forzáme como tantas veces lo hiciste! Vamos, usá la fuerza para imponerte; creés que tu faceta es la más importante entre nosotros?
RAFAEL I : Basta Rafael!
RAFAEL II: No Rafael, es hora de sacarnos las vendas y enfrentarnos cara a cara.
RAFAEL I : No quiero enfrentamientos entre nosotros.
RAFAEL II: Pero si pretendés dominarme!
RAFAEL I : Solo aspiro a una calma interna.
RAFAEL II: Si claro, elevandoté por sobre mis sufrimientos.
RAFAEL I : Y qué hay de los míos?!
RAFAEL II: Jamás los compartiste con nadie que no fueran tus libretos: vos, vos, siempre vos...
RAFAEL I : No podía, aún hoy no puedo hacerlo!
RAFAEL II: Mentiras, mentiras, mentiras..! Esa negación es una excusa para postergar nuestra meta!
RAFAEL I : (Tocado enfrenta a RAFAEL II violentamente y le calza el bonete) Basta de hipótesis aventuradas! Quién te creés que sos?! Ahora vas a sufrir en carne propia y por adelantado la impotencia del escritor. (Leit motiv de platillos.)

(RAFAEL I arroja a RAFAEL II hacia un costado y este caerá al suelo presa de convulsiones. Intentará gritar pero solo logrará muecas grotescas, sin sonidos. Se retorcerá de dolor.)

RAFAEL I : Y ahora actor, qué se siente? Cómo se viven los espasmos en el estómago? Esa sensación de que hay algo que es necesario decir, visiones tremendas por traducir en palabras; cómo se transfieren esas emociones violentas que parecen imposibles de contener? Todo es incomprensible y familiar a la vez; sentís un hormigueo en las manos, y frío, y calor... es desesperante no es verdad? Quiénes son los seres que se instalaron en esa mente que ahora te resulta ajena a vos mismo? De dónde provienen esas voces que te exigen vida propia? Sufrí actor; sufrí la madurez artística; sufrí la vida, nuestra propia vida que estás obsesionado por destruir... (RAFAEL II logra emitir su reprimido grito y -como iluminado- se incorpora.)
RAFAEL II: Mi nombre es Rafael!
RAFAEL III : No!
RAFAEL II: También podría serlo Rafael, o Rafael. Cualquiera de ellos estaría bien, porque cada uno de nosotros somos los componentes de una misma esencia.
RAFAEL I : Rafael ya es suficiente, no sigas.
RAFAEL II: Anhelamos la utopía de unir nuestros deseos, algo en mi quiere escribir lo que actúa, algo en vos se debate por corporizar lo que escribe.
RAFAEL I : Nunca vas a lograrlo! Todo es demasiado abstracto! (Leit Motiv platillos)
RAFAEL II: Y que es la vida sino “...una sombra que pasa, un pobre cómico que se pavonéa y agita una hora sobre la escena y después no se le oye más...”
RAFAEL I : Ya basta de usar palabras que no te pertenecen todavía Rafael!
RAFAEL II: Rafael, Rafi miráme a los ojos un momento. Qué ves en ellos? Por favor no huyas, somos uno Rafael, debemos oírnos, sentirnos, reconocernos el uno en el otro (se quita la chaqueta).
RAFAEL I : No! No lo hagas! Nos mataría de vernos!
RAFAEL II: Por qué?
RAFAEL I : Porque El también forma parte de nosotros, o ya lo olvidaste? Pensaría que lo estamos excluyendo.
RAFAEL II: Y acaso no es así? Reaccioná por favor, no nos queda mucho tiempo!
RAFAEL I : Pero es que me querés volver loco?! Hace unos minutos te asustaba la idea de besarme y ahora...
RAFAEL II: Es que ahora lo entiendo. Comprendo tu impulso y necesito experimentar por mi mismo otra realidad más allá de la ficción, quiero sentir al escritor, y que vos sientas al actor ahora.
RAFAEL I : No es el momento, es necesario que vivas un poco más.
RAFAEL II: Ahora Rafael; ya, sin perder un instante.
RAFAEL I : (Tomándolo por los brazos) Esto es un sueño, un sueño me oís? No existe! Nada es verdad, todo es una ilusión.
RAFAEL II: No dejés que te supere la ficción (Le quita bruscamente el bonete y se saca a su vez el propio) Arrancála de vos Rafael! Esto es real (lo estrecha entre sus brazos), esto es lo verdadero, lo auténtico...
RAFAEL I : (Escapándose del abrazo) No! Eso no es posible Rafael....
RAFAEL II: Maldito represor! Bestia egoísta que en su soledad no permite que otros se amen!
RAFAEL I : Calláte, puede oírte.
RAFAEL II: Eso es lo que quiero! Sé que ese tirano está siempre espiandonos, dónde estás ahora?!
RAFAEL I : Qué te pasa?
RAFAEL II: Es fácil para El dirigirnos cuando actuamos tus libretos Rafael; pero qué sabe de nosotros en realidad?
RAFAEL I : Todo! El ya pasó por todo esto Rafael, ya lo vivió.
RAFAEL II: Y entonces qué le pasa?! Acaso perdió la memoria? Ya no recuerda la confusión del actor, su miedo al encarar un personaje, el temor al fracaso, a la inconformidad?
RAFAEL I : Tal vez por eso huye al finalizar cada ensayo.
RAFAEL II: Lo odio! Odio sus diálogos, odio sus palabras, su risa, su llanto; odio este dolor que me imprimió para siempre.
RAFAEL I : Hablás de mí? Estás diciendo que me odias, que odias al escritor?
RAFAEL II: No sé, no sé que es lo que amo o lo que odio; tengo pánico a lo que vendrá... Ustedes me adelantan imágenes terribles...
RAFAEL I :Es tu destino.(Leit Motiv de platillos)
RAFAEL II: No! Mi destino es la muerte! Voy a evitar el proceso Rafael; voy a cambiar el futuro, nuestro futuro, y alcanzaremos la dicha, estas manos... ohhh con estas manos Rafael...
RAFAEL I : Alto! No lo digás Rafael!
RAFAEL II: Sí!; voy a gritar el final, voy a destruir las escenas que restan... voy a improvisar la obra que quiero!
RAFAEL I : Rafael...
RAFAEL II: El bonete Rafael!
RAFAEL I : No, yo...
RAFAEL II: (Toma los bonetes y le da el suyo a RAFAEL I. Ambos se lo colocan) Todo será perfecto, al fin estaremos unidos (se acercan) Seremos un artista sin facetas esparcidas!
RAFAEL I : Si, uno al fin. (Tienden sus manos y avanzan el uno hacia el otro) Si pudiéramos lograrlo...
RAFAEL II: Cláro que vamos a lograrlo!

Escena 9 (RAFAEL I – RAFAEL II – RAFAEL III)
(Estallidos de sonidos. Caen sobre los actores sendos lazos que los separarán intentando arrastrarlos hacia bastidores. Esfuerzo de los actores por volver a unirse. Voz de RAFAEL III. Luces intermitentes. Flashes)

RAFAEL II: Rafael, tus manos, rápido tus manos.
RAFAEL I : No temas Rafael solo es un sueño, despierta Rafael no te abandones!
RAFAEL II: (Se va adormeciendo mientras la soga lo arrastra lentamente hacia bastidores) Quién soy? Acaso te conozco?
RAFAEL I : Es un sueño... Es un sueño! Rafael, abre tus ojos...
RAFAEL II: Quién eres? Por qué me gritas así? Oh, tengo tanto sueño...
RAFAEL I : Rafael no desistas! Tira con fuerza, no dejes que te arrastre!
RAFAEL II: No puedo, no puedo Rafael! El va a lograrlo otra vez...
RAFAEL I : No! No vamos a permitirlo! Recuerda que todo es una ilusión! Sigue tirando, tira con fuerza... Eso, eso es, un poco más, un poco más y estarás conmigo...
RAFAEL II: Basta... basta esto es doloroso, ya no quiero seguir; adiós Rafael... Ya no puedo continuar, tengo sueño... tengo demasiado sueño...
RAFAEL I : Rafael, Rafael! Los árboles Rafael! Iremos al río y subiremos al árbol más grande (Al oír esto RAFAEL II comienza a reaccionar e intentará recobrarse) Buscaremos al más hermoso... Eso es, vamos Rafael, un poco más... Y la luna, veremos como la luna fabrica estrellas sobre el agua. Sí Rafael, eso es... un poco más...

(Súbitamente se aflojan las cuerdas provocando la caída de ambos actores que rodarán enredándose entre sí con las mismas. El escenario se llena de una luz muy blanca. Los actores se quitan los bonetes y se incorporarán aturdidos.)

RAFAEL II: Qué ocurrió?
RAFAEL I : No lo sé. Estábamos ensayando y...
RAFAEL II: Dios, mi cabeza.... qué dolor! Todo me da vueltas...

(RAFAEL III se levanta de su silla y rompiendo su estatismo ingresa a escena provocando el desconcierto en RAFAEL I y en RAFAEL II. Lleva una carpeta debajo del brazo de la que asoman varios apuntes de futuras y soñadas puestas de teatro.)

Escena 10 (RAFAEL I, RAFAEL II y RAFAEL III)
RAFAEL III: No! No! No! Qué están haciendo ustedes con mi puesta?! Esto no es lo que yo marqué! Me engañaron! Tomaron mi diseño y no están logrando sino basura con él!
RAFAEL II: Rafael!, Dios mío!, Rafi te lo dije, te dije que El estaría espiándonos...
RAFAEL I : Esperá, no te alterés...
RAFAEL III: Dónde está El?!
RAFAEL I : Lo ves? Sabía que no era El!
RAFAEL II: Gracias a Dios! Qué susto me di! Por un momento creí que estábamos perdidos.
RAFAEL I : Señor Rafael, pero qué sorpresa usted por acá...
RAFAEL III: Qué sorpresas ni sorpresas!
RAFAEL II: Calmesé Rafael.
RAFAEL III: No me calmo nada!
RAFAEL I : Serenesé por favor, yo voy a explicarle.
RAFAEL III: Qué es lo que quieren explicar?! Que son pésimos actores? Que no entienden nada? Que no tienen idea de los significados, de los elevados mensajes de mi puesta? (Paseándose nerviosamente) Dios, Dios quién me mandó a mí a aceptarlos a ustedes?! No si ya lo presentía yo, ya me lo veía venir! Miren, desde que los vi supe que no iba a funcionar; pero confié, acepté pensando que hacía juicios infundados... Sin embargo vengo y que me encuentro? Pe... pero mirensé la facha (RAFAEL II se mira) Qué es lo que quieren?! Revolcar mi prestigio?! Qué es esto una venganza?! Oh, creo que voy a desmayarme... todo mi trabajo... todo mi trabajo...
RAFAEL II: Usted no se preocupe, es que todavía no entiende; pero ya va a ver cuando le expliquemos. Resulta que es una adaptación experimental de su puesta, afectada a activaciones psico-somáticas con el objeto de...
RAFAEL III: Pero qué dice este hombre?! Es que se volvió loco, así... de golpe?
RAFAEL II: (Que insiste en terminar) ...con el objeto de propagar...
RAFAEL I : (Tapándole la boca con la mano) Disculpe Rafael, lo que Rafael trata de decir es que su dirección artística es demasiado importante como para que pase desapercibida. Es como un gran sistema de signos icónicos delicadamente insertos en un mecanismo de equilibrio epocal que connota a ciertas acciones humanas universales; y es allí -precisamente- donde queremos nosotros hacer hincapié.
RAFAEL III: (Desorientado) Caramba señores... si es así... Creo que me han dejado ustedes... Sí! Es obvio que yo apuntaba a todo eso en mi imaginario pero... ciertamente (Tose. Risitas nerviosas.) ciertamente no pensaba que ustedes...
RAFAEL I : Lo descubriríamos?, oh no se haga problemas... Por cierto nos costó un poco llegar a todo esto, semanas y semanas de análisis e investigaciones filosóficas, pero al fin lo logramos; y si usted ve algunos cambios solo se deben a que el público digiera...
RAFAEL III: Diga?
RAFAEL I : Qué cosa?
RAFAEL III: No sé, usted dijo que el público dijera.
RAFAEL I : Yo no dije que el público dijera nada.
RAFAEL III: Cómo dice que lo dijo? Si yo oí claramente cuando usted dijo que los cambios eran para que el público diga de no se que manera.., yo no quiero que el público diga nada!
RAFAEL I : (Sonriendo ante el equívoco) Oh, ya entiendo. No, no se trata de que el espectador diga nada de ninguna manera; sino que estos cambios los provocamos con Rafael para que la gente digiera, entienda, comprenda, asimile su rico mensaje Rafael.
RAFAEL II: (Feliz de poder terminar al fin la frase) Claro que sí! Lo hacemos con el objeto de propagar nuevas tendencias que shockeén al estado aletargado del teatro en estos tiempos Rafael (RAFAEL I asiente sonriendo).
RAFAEL III: Oh comprendo, si si ahora comprendo... Bueno les pido sepan disculpar mi ataque (risitas), por llamarlo de alguna manera, pero caramba!, deben entender ustedes que me asusté un poco. (Se le caen algunos papeles, va a juntarlos pero se le adelanta RAFAEL II) Oh, no se moleste Rafael; yo puedo.
RAFAEL II: No es ninguna molestia (Curioso de los apuntes, y tratando de ver)
RAFAEL III: Gracias, es usted muy amable Rafael.
RAFAEL II: (Aludiendo a los papeles que tiende a RAFAEL III) Otro proyecto quizás Rafael?
RAFAEL III: Si eso intenta ser. (Incómodo.) Señores, estoy muy avergonzado; les pido disculpas... Fui un torpe.
RAFAEL I : No se preocupe Rafael.
RAFAEL II: Nosotros comprendemos todo Rafael.
RAFAEL III: Bién, me voy entonces (no sabe como retirarse) Si pudiera ayudar en algo... (Cómplice) Conque propagar nuevas tendencias, eh?
RAFAEL I : Exacto. (A coro con RAFAEL II) Que shockéen al estado aletargado del teatro en estos tiempos Rafael!
(RAFAEL III se va. RAFAEL I y RAFAEL II lo saludan y quedan mirando hacia adelante mientras comienza a sonar el cuarto movimiento de la 9º sinfonía de Beethoven, Himno a la alegría.)

Apagón lento.
Fin del Acto Primero.







Acto Segundo.



Escena 1 (RAFAEL III – RAFAEL II)

(Día siguiente. Escenario vacío en penumbras. Luz. RAFAEL III sentado en su silla como al principio del Acto I. Entra RAFAEL II caminando por el pasillo que divide a la platea, con el sobretodo colgando de su antebrazo. Al subirse al escenario llama varias veces a RAFAEL I y al no obtener respuestas, mira la prenda que tiene en sus manos, busca un sitio para colgarla; pero inmediatamente abandona el intento y sale por el lateral derecho.)


Escena 2 (RAFAEL III – RAFAEL I)

(Segundos después entra RAFAEL I por el lateral izquierdo con un baúl que, al igual que en el acto anterior, arrastará por todo el escenario buscándole ubicación. Ruidos entre bastidores.)

RAFAEL I : (Sobresaltado) Sos vos Rafael? (Silencio. Se acerca hacia el lateral derecho) Rafael !
RAFAEL II: (En off) Estoy acá Rafael !
RAFAEL I : Creí que todavía no habías llegado. (Va hasta el baúl y abre la tapa, saca la ropa que hay en el interior, verifica el mismo y vuelve a introducir nuevamente todo para cerrar la tapa. Sale por lateral izquierdo.).

Escena 3 (RAFAEL III – RAFAEL II)
(Entra por lateral derecho. Lleva puesto el sobretodo que trajera en sus manos al principio del acto. Arrastra una escalera y un perchero antiguo. Al llegar al centro del escenario -cerca del baúl- queda fijo en su postura unos segundos como detenido en el tiempo, luego avanza unos pasos, se detiene, observa a su alrededor y llama a RAFAEL I. Silencio. Tira lo que trae al piso provocando un gran estrépito. Pausa. Queda fijo en el lugar. Toma la escalera, la abre y acomoda a un costado -el izquierdo- del baúl. Luego para el perchero. Se quita el sobretodo y lo cuelga. Llama nuevamente a RAFAEL I. Silencio. Sale por lateral derecho.)
Escena 4 (RAFAEL III – RAFAEL I – RAFAEL II)
(Entra RAFAEL I por lateral izquierdo empujando un cubo. Arriba del mismo hay un fonógrafo. Lo abandona un segundo, observa el lugar y -volviendo a correr el cubo- lo ubica en el proscenio, hacia la izquierda. Camina al centro del escenario y busca algo en el piso alrededor del baúl. Se arrodilla y revisa con ansiedad. Se prende una luz que dá de lleno sobre él.)

Escena 5 (RAFAEL III - RAFAEL I - RAFAEL II)
(Segundos después entra RAFAEL II por lateral derecho. Al ver a RAFAEL I pregunta: )
RAFAEL II: Qué pasa Rafael, se te perdió algo?
RAFAEL I : (Buscando) Maldición! (se levanta nervioso) ...maldición!, maldición! (Va hacia el baúl y lo patea).
RAFAEL II: Eh... eh... y ahora qué pasa hombre?
RAFAEL I : La marca..., borraron la marca de tiza que hice ayer. Ahora cómo sé donde va ubicado el baúl?!
RAFAEL II: (Riendo) Pero que zonso que sos; es tan fácil! El baúl siempre va en el centro Rafi.
RAFAEL I: Es que yo había marcado el lugar justo. Cómo saberlo ahora?
RAFAEL II: Pero si es muy fácil! Te acordás de lo que me dijiste? El baúl va en el medio del escenario; y si nos cuidamos de no moverlo un centímetro más a la derecha, o un centímetro más hacia la izquierda, o un centímetro hacia atrás, o hacia adelante; hallaremos de esa manera el lugar exacto. (Va hacia uno de los laterales y cuenta los pasos a lo largo del escenario, luego repite la operación con la profundidad del mismo. Saca por fin las cuentas aparatosamente y se para en el centro del escenario) -Mirá, ves? Este es el lugar!
RAFAEL I : (Sorprendido) Creo que había menospreciado tu inteligencia... Te debo una disculpa. (Lleva el baúl al lugar que indico RAFAEL II.)
RAFAEL II: No hace falta que lo hagas (con falsa humildad) cualquiera en mi lugar lo hubiera deducido.
RAFAEL I : (Observando el escenario) -Bien entonces, creo que no falta nada (verifica). A ver: el perchero, el baúl... la escalera, el cubo, el fonógrafo...
RAFAEL II: Y el sobretodo, traje el sobretodo!
RAFAEL I : Si, si... si; ya lo veo no soy torpe. (Va hacia adelante y frunciendo el ceño mira hacia la platea). Creés que venga alguien hoy?
RAFAEL II: No lo creo.
RAFAEL I : Podés asegurarlo?
RAFAEL II: Si.
RAFAEL I : Por qué estás tan seguro?
RAFAEL II: Porque puse un cartel informando que no hay función; de esa manera no habrá margen de error y por lo tanto nadie podrá infiltrarse en nuestros ensayos. También pedí que nos dejaran solos para trabajar más tranquilos, y que al salir cerraran con llaves.
RAFAEL I : Lo de ayer no puede repetirse.
RAFAEL II: No. No puede.
RAFAEL I : Todo ese público...
RAFAEL II: Hoy estaremos solos.
RAFAEL I : Solos?
RAFAEL II: Completamente solos. Empezamos?
RAFAEL I : Si.

(Sacan lo trajes con los que van a caracterizarse del baúl. RAFAEL II toma un espejo de mano. Se sienta de perfil al público y se mira en el espejo y lo guarda nuevamente. RAFAEL I camina por el escenario. Se coloca cada uno su bonete y, mientras RAFAEL III enuncia su texto, RAFAEL I toma un par de platillos de percusión y se ubicará en la escalera. En un momento determinado sus soliloquios se interpondrán, y cada uno luchará por ser el más fuerte mediante la superposición de sus voces.)

Escena 6 (RAFAEL III – RAFAEL II – RAFAEL I)
RAFAEL III: (RAFAEL I irá adquiriendo la postura de un viejo). Tic... tac... tic... tac, tic... tac... tic, tac... Tic, tac, tic, tac... tac, tac... El tiempo siempre llega, nada lo detiene..; ni siquiera la muerte pues, qué otra cosa es ella misma sino una porción de tiempo aletargado? Busco en el mapa de mi rostro los sinuosos arabescos de una vida pasada que se oculta tras la memoria de ese tiempo absurdo y tramposo. Tic... tac... tic... tac. Tic, tac... tic... tac... tic, tac, tic, tac... tic..., tac, tic, tac... Cómo cabalgan las horas robándome las fuerzas! El ocaso se acerca y todavía no estoy listo para irme. Tengo miedo... Me siento tan desprotegido; y esas voces... (*1) esas voces que no callan, que no paran de gritarme mis pecados... Basta! Basta! Silencio! Que apaguen esos gritos; que no giman ni lloren... Ahoguen las voces, mátenlos, mátenlos! Acaben con ellos, que no queden testigos! Basta!,... bastaaa! Devuélveme mis días acreedor del averno! Injusto jinete de los vientos, regrésame los años con que nutres tu existencia! Apiádate de mi vejez, no me arrojes la vida a una distancia a la que mis huesos no puedan acercarme. Agrega unas horas a mi cuenta pendiente en el infierno... Tiempo, tiempo ten piedad, te lo suplico; no detengas tu reloj... piedad... piedad... (Suenan las campanadas de la última hora. RAFAEL II cae muerto.)

*(1) Nota: Las voces las hará RAFAEL I desde lo alto de la escalera tratando de imitar los sonidos provenientes de una masacre: pedidos de piedad, nóes, gemidos de dolor, etc...

(El siguiente párrafo de RAFAEL I irá superpuesto al de RAFAEL III a partir de que este dice: “...devuélveme mis días acreedor del averno...”)

RAFAEL I : Las huestes de la muerte perseguirán tu cuerpo deshojado por los años. Irán tras tu alma fétida, impregnada por olores nauseabundos que rebelan tus crímenes oscuros. No!, no implores el perdón; ya no puedes faltar al festín de los demonios.., la danza macabra espera que marques sus pasos (Comienza a golpear los platillos. Se escuchan campanadas.) Oye..., oye los tañidos; escucha los primeros sones... (Ante la muerte de RAFAEL II) La gran fiesta ha comenzado!

(A la muerte de RAFAEL II, RAFAEL I estará erguido en el último peldaño de la escalera haciendo sonar los platillos. Imagen fija. Ultimos tañidos en off. Inmovilidad de ambos actores. Penumbras. Se enciende sobre RAFAEL I una luz blanca que lo impulsa a sentarse sorpresivamente sobre el escalón con los brazos colgando entre sus piernas separadas. Observa desde lo alto a la figura de RAFAEL II aún estirada en el suelo. Se quita el bonete y le habla.)

Escena 7 (RAFAEL I – RAFAEL II)
RAFAEL I : Creés que va a salir todo como lo planeamos?
RAFAEL II: (Ofuscado se incorpora a medias sacándose el bonete) Si interrumpieras menos y ensayáramos por lo menos una vez de corrido sería posible, en gran medida, que no nos equivoquemos; o al menos sabríamos a que atenernos (Transición) Has estado escribiendo algo ultimamente?
RAFAEL I : Esbocé algunas líneas por ahí..., pero nada con ilación; nada importante.
RAFAEL II: Tal vez podría ayudarte con algunas pautas.
RAFAEL I : No! De ninguna manera. Las historias que escribo son solamente mías; no acepto intromisiones.
RAFAEL II: Aún si fueran ideas geniales?
RAFAEL I : En ese caso dejarían de ser mis fantasías y yo solo sería un transmisor de las tuyas.
RAFAEL II: Vamos.., conformaríamos un buen equipo. Qué me dirías si te propusiera a dos hombres; a dos artistas -para ser precisos a dos actores- que dominados por una pasión en común pierden la noción de los límites entre una situación real y otra ficticia. Y en ese marco de expectante misterio se ven llevados a cometer un crimen.
RAFAEL I : Parece una buena historia. Pero cómo crearías el suspenso?
RAFAEL II: Originando una ficción más creíble que la propia realidad de los actores que recrean la fábula; es decir una historia contenida por otra, mimetizadas de tal manera que se extravíe toda conjetura posible de acercamiento a la verdad.
RAFAEL I : No se, no se... me resulta complicado de entender.
RAFAEL II: Supongamos a dos seres que juegan continuamente bordeando los límites realidad-fantasía (Juega con el bonete) deslizándose permanentemente entre una y otra dimensión...
RAFAEL I : Algo así como usar la fantasía para disfrazar algo concreto.
RAFAEL II: Ensayar lo imprevisible para cambiarlo en previsible.
RAFAEL I : No, no esto se complica demasiado. Habría que buscar un método, un sistema de signos mucho más complejo a los que estoy acostumbrado.
RAFAEL II: Allí está el desafío; en el intentarlo (se coloca el bonete). Presiento que ya debe estar por llegar, debemos apurarnos; ya no hay tiempo que perder... (Incita a RAFAEL I a colocarse el bonete) Vamos! La discusión está por empezar!
RAFAEL I : (Hace el intento de colocarse el bonete pero desiste) Creés que vendrá esta tarde?
RAFAEL II: (Fastidiado se quita el bonete) Quién?
RAFAEL I : El.
RAFAEL II: El?
RAFAEL I : Si. Lo creés?
RAFAEL II: No, no lo creo.
RAFAEL I : Estás seguro?
RAFAEL II: Puse un cartel.
RAFAEL I : Estás seguro?
RAFAEL II: Sí!, lo estoy; en él decía: “Ensayos suspendidos”.
RAFAEL I : Ensayos suspendidos?
RAFAEL II: Si.
RAFAEL I : De todos modos me gustaría verificarlo.
RAFAEL II: Qué cosa?
RAFAEL I : Si todavía está el cartel.
RAFAEL II: (Al borde de la impaciencia) El cartel está en su lugar!
RAFAEL I : Estás seguro?
RAFAEL II: Sí!!, lo estoy!!! (Pausa. Confundido.) Aunque... no sé, siempre queda abierta la posibilidad de que...
RAFAEL I : Lo ves! Entonces no estás del todo seguro!
RAFAEL II: Bueno ya basta! Te dije que puse el cartel y si está o no colgado eso ya no nos importa!
RAFAEL I : Está bien, voy a confiar en vos (Al advertir que RAFAEL II se coloca el sobretodo) Te parece que tomemos esa parte justo ahora?
RAFAEL II: (Al tiempo que se calza el bonete) Ellos están llegando a su punto culminante y a esta altura ya la suerte ha sido echada. (Transición. Acción mimada por RAFAEL I y RAFAEL II. La voz será de RAFAEL III como en todas las ficciones.)

Escena 8 (RAFAEL III – RAFAEL II – RAFAEL I. Voz de RAFAEL III)
RAFAEL II: No quiero pensar que se me está insubordinando. Adónde quiere llegar con todo este planteo absurdo?!
RAFAEL I : (Colocándose incómodamente su bonete expresa su nerviosismo) Creo... Todo se está convirtiendo en un circo romano señor...
RAFAEL II: (Emitiendo una risotada) Circo romano? (Ríe) Pero qué me dice, mi estimado camarada, o es que acaso los años le han vuelto sensible el corazón?
RAFAEL I : No se trata de eso.
RAFAEL II: Y de qué entonces? He notado ciertas inseguridades ultimamente en su conducta, querrá aplacar los reclamos de su conciencia quizás? (Se pasea chasqueando irónicamente la lengua) No, no, no, no. En todo este asunto usted es tan culpable como yo; no se puede salir así como así: mágicamente, sin correr ciertos riesgos... (Comienza a colocarse un par de guantes blancos)
RAFAEL I : Me está amenazando?
RAFAEL II: Amenazarlo? Oh pero qué fantasía la suya; cómo puede pensar algo semejante de mí? Usted es uno de los nuestros, conozco su esencia, sus gustos, sus (Haciendo hincapié) debilidades mejor que usted mismo mi estimado Levín...
RAFAEL I : Ya no resisto la inmundicia que me rodea, es... atroz. Nos convertimos en salvajes... Qué sentido tiene toda esta violencia que infligimos descarnadamente sobre esta gente?
RAFAEL II: Debe existir un modelo de conducta! Los descarriados deben ser castigados para ejemplo!
RAFAEL I : Ya no estoy tan seguro de que esa sea la solución al respecto. Siento que la causa ha perdido vigencia, en otra época quizás... pero ahora..., toda esta sangre... Con qué objeto?!
RAFAEL II: Deseo pensar que no es consiente de lo que dice Levín, usted sabe lo que implica un razonamiento de esa índole en uno de nosotros, sabe los riesgos que se corren al ventilar tan abiertamente sus ideas... Sin embargo presiento que hay algo más, algo que todavía no me dice... Vamos Levín, confíe en mi; se que hay algo más que lo está molestando, yo puedo ayudarlo Levín, o alguna vez lo defraudé?
RAFAEL I : No se trata de eso.
RAFAEL II: Entonces?
RAFAEL I : Me retiro señor. No puedo seguir adelante, mi ética...
RAFAEL II: Su ética, Levín su ética? Pero qué me dice?! Su ética no existe. Su individualidad no existe. Usted es un engranaje más al servicio del sistema; al igual que yo, al igual que cada uno del resto que afuera luchan por nuestra causa!
RAFAEL I : Pero de qué causa me habla?! Ya no existe tal causa, no hay nada en pié. Solo un par de locos que ordenan demagógicamente y un centenar de asesinos a sueldo que pisotean a los inocentes que aún sobreviven en sus refugios... Ya no hay nada de su antiguo imperio!
RAFAEL II: Eso es ridículo ! Usted es un traidor y yo me voy a ocupar de que se arrepienta de lo que está diciendo!
RAFAEL I : Ya no me reprimen sus palabras. No tiene el poder para asustarme; ya no es nadie, nunca lo fue!
RAFAEL II: Y cómo piensa derrotarme Levín ? Va a destapar la olla solo contra todos, quién le va a creer? Ya todo está frío. No hay testigos.
RAFAEL I : Los testigos pueden volver a comprarse. Iré a la prensa me entregaré; tengo documentaciones, pruebas... no soy tonto... Además no estoy solo como usted dice. Hay mucha gente que como yo necesita hablar, declarar todo lo que sabe, todo aquello a lo que fue obligada a hacer porque no había opción; me entiende ? Vio como se dan vuelta las cosas a veces ? Un consejo: No me amenace y yo que usted, empezaría a asustarme...
RAFAEL II: Maldito cobarde! Nadie va a creerte, no vas a lograrlo! Todavía tenemos el poder, qué imaginabas?, voy a destruirte; vas a pagar tu traición! ( Se abalanza sobre RAFAEL I y ruedan por el piso envueltos en una lucha que es interrumpida por la llegada de RAFAEL III.)

Escena 9 (RAFAEL III - RAFAEL I - RAFAEL II.)
RAFAEL III : ( Desde el pasillo) Bravo ! Bravo señores ! Magnífica representación; son ustedes formidables!
RAFAEL I : (Quitándose el bonete) Pero, cómo hizo para entrar ?! No dijiste que habías cerrado con llaves ?
RAFAEL II: No entiendo ... Quizás lo olvidaron ( Se quita a su vez el bonete ).
RAFAEL I : Sos un inútil ! No se te puede confiar nada que todo lo hechás a perder!
RAFAEL III: Estoy muy complacido con lo que acabo de ver, fue una escena de notable realismo. Realmente los felicito caballeros; si el resto de la obra fue respetado como esta parte, la puesta será un verdadero acontecimiento ( observa a su alrededor ).
RAFAEL II: Le estamos muy agradecidos Rafael.
RAFAEL III: Por favor, el agradecido soy yo; aunque la escenografía no es exactamente como yo... Podría ser un poco más sencilla, no? Digo.., tal vez colocando solo el baúl por acá y un cubo por...
RAFAEL I: Cómo es que está aquí ?
RAFAEL II: ( Ante el asombro de RAFAEL III ) A lo que Rafael se refiere es que pedimos que cerraran la puerta de calle debido a que ayer hubo un mal entendido. Se introdujeron algunas personas y tuvimos entonces que improvisar unas escenas para contentarlos aunque de todos modos fue interesante la experiencia...
RAFAEL I : Si claro! Interesantísima.
RAFAEL III : Qué extraño.., Bueno yo solamente entré; la puerta estaba abierta y..
RAFAEL I : Pero qué incompetencia! Lo olvidaron! Lo ves? Te lo dije, fue tu culpa, tendrías que haberte asegurado antes...
RAFAEL II: Y mientras tanto vos que hacías ?! Todo lo que tengo que hacer yo! Todo es mi responsabilidad! Ya estoy harto de todo esto...
RAFAEL I: Qué?! Cómo dijiste?!
RAFAEL II: Lo que oíste: estoy harto!
RAFAEL III: Perdón pero yo solo...
RAFAEL I : (Amenazante) Cómo que estás harto?! Qué querés decir con eso?
RAFAEL III: Señores, no quisiera importunar pero...
RAFAEL I : Se puede callar la boca?! No ve que esto es entre él y yo?!
RAFAEL III: Un momento, usted a mi no va a gritarme.
RAFAEL I : Já! Mírenmelo al señor; que no le grito? Mire como le grito (dándole golpecitos con el dedo índice en el pecho) Mire como le grito todo lo que quiero en la cara!
RAFAEL II: Rafael!
RAFAEL I : Rafael nada! Siempre quise gritarle unas cuantas al gusano este!
RAFAEL III: Un momento no le permito...
RAFAEL I : Usted va a permitirme esto y mucho más! Y mire como le grito: gusano!! (RAFAEL III se encoleriza. RAFAEL II se interpone tratando de separarlos) Gusano engreído! Siempre tratando de refregarnos sus asquerosos aires de director sabelotodo; quién se crée que es?!
RAFAEL III: Cómo que quién me creo que soy?! Soy el director de la pieza que están ensayando!
RAFAEL I : (Riendo conjuntamente con RAFAEL II) El director de la pieza? Lo oís Rafael?
RAFAEL II: Si, el director de la pieza; qué cómico!
RAFAEL III: Qué es lo cómico?!
RAFAEL I : Su inocencia, su tonta confianza (Se pone su bonete) Aquí los únicos creadores, los auténticos beneficiarios ante la ley, somos nosotros!
RAFAEL III: (Incrédulo) Ustedes... No, no, no pudieron robarme tan abiertamente!
RAFAEL I : Alguien debía tomar la iniciativa... Yo sabía que usted iba ilando la puesta a medida que avanzaban nuestros ensayos, así que se lo comenté a Rafael y..; en definitiva nosotros seríamos algo así como sus directores asistentes. Solo me adelanté a unos trámites para los cuales usted no era el indicado.
RAFAEL II: (Que anteriormente se había ya puesto su bonete) Usted es un soñador.
RAFAEL III: Basuras!, no pudieron hacerlo no, no, no, no lo creo, no lo creo; no puede ser posible!
RAFAEL I : (Rodeándolo cínicamente) Véalo como un favor que le hacemos, después de todo es su primer puesta panfletista... No se preocupe, ya vendrán otras... (RAFAEL III desbordado trata de golpear a RAFAEL I, pero es sorprendido por RAFAEL II que lo toma por detrás y -apretándole el cuello- lo asfixia. Cae pesadamente el cuerpo sin vida. RAFAEL I y RAFAEL II se miran azorados y se quitan sendos bonetes.)
RAFAEL I : (Jadea profundamente y festeja el triunfo tratando de saborear la tensión reinante) Uhhh, uhúhh no puedo creerlo; lo hicimos!
RAFAEL II: Sí, que placer... Todavía siento el palpitar de las venas de su cuello en mis manos, y su garganta... esforzándose por permitir que el aire fluya... ahhh es indescriptible...
RAFAEL I : Y viste esos ojos? Realmente estaba furioso; en un momento creí que me vencería.
RAFAEL II: Pero no lo hizo. Estuviste estupendo; te admiro tanto Rafael...
RAFAEL I : Oh Rafael no es para tanto. Aparte si no fuera por tu intervención; esta vez fue correcta, ni un instante de duda; seguro en todo momento: impecable! Te felicito, de veras que estoy contento.
RAFAEL II: Solo seguí los impulsos. Pero cómo se te ocurrió eso de los auténticos beneficiarios? Eso fue fantástico!
RAFAEL I : No tengo idea, se me ocurrió así nada más y lo dije.
RAFAEL II: Nada más efectivo para que él reaccionara.
RAFAEL I : El?
RAFAEL II: Quién?
RAFAEL I : No sé, vos dijiste “El”.
RAFAEL II: Que yo dije qué? Si yo no dije nada; te habrá parecido (Observando el cadáver) Qué hacemos con el maniquí?
RAFAEL I : No sé, no pensé en eso todavía; podría ir en el baúl como en “La soga” de Hamilton, pero no creo que entre en este, así que será mejor dejarlo por ahora entre bastidores para que no estorbe. A ver, ayudáme (RAFAEL I intenta arrastrar el cuerpo de RAFAEL III hacia bastidores. RAFAEL II se sienta sobre el baúl.)

Escena 10 (RAFAEL II)
RAFAEL II: Ah no, no me pidas eso. Si sabés que me repugnan los cadáveres! (Se despereza) Ahhh, esto es lo maravilloso de jugar con los límites! (Juguetea con su bonete) No sabe uno nunca donde está parado. Rafi estás oyéndome?! Decía que jamás sabremos de qué lado nos encontramos (Reflexivo) Es extraño no?, pero por alguna razón nuestra propia naturaleza nos incita a seguir avanzando en esa confusión (Gritos de RAFAEL I entre bastidores).

Escena 11 (RAFAEL II – RAFAEL I)
RAFAEL I : Rafaeeeel! (Aparece en escena totalmente aterrado con el bonete en sus manos) Rafael... es... está muerto! Está muerto!
RAFAEL II: Quién?
RAFAEL I : El!
RAFAEL II: El?
RAFAEL I : Si! Es El! Oh Rafael estoy arrepentido, no debimos hacerlo, no debimos...
RAFAEL II: Tonterías! De todos modos no se trata de El, o es que no le viste la cara? Era Rafael el que arrastrabas!
RAFAEL I : Rafael?
RAFAEL II: Si tonto, o ya lo olvidaste?
RAFAEL I : Era Rafael entonces, pero... está muerto... Dios... nosotros lo hicimos, lo matamos Rafael!
RAFAEL II: Nosotros?
RAFAEL I : Si, Dios mío! Está muerto, yo lo vi... Estaba arrastrando el maniquí cuando...
RAFAEL II: (Se calza el bonete) No era un maniquí.
RAFAEL I : Quién?
RAFAEL II: Lo que arrastrabas.
RAFAEL I : No! Yo...
RAFAEL II: Nosotros (se quita el bonete)
RAFAEL I : No puede ser, esto es una locura...
RAFAEL II: Dos actores Rafael; dos actores que dominados por una pasión en común pierden la noción de los límites entre una situación real y otra ficticia...
RAFAEL I : No, no eso no es posible!
RAFAEL II: Y en ese marco de expectante misterio se ven llevados a cometer un crimen.
RAFAEL I : No! No! Yo no soy un asesino!
RAFAEL II: Ni yo.
RAFAEL I : Entonces?
RAFAEL II: El ya está muerto.
RAFAEL I : El?
RAFAEL II: No El no; Rafael lo está.
RAFAEL I : Rafael?
RAFAEL II: Sí! Definitivamente muerto.
RAFAEL I : Pero, y ahora qué vamos a hacer?
RAFAEL II: Retomaremos nuestra obra.
RAFAEL I : Y si viene El?
RAFAEL II: Le explicaremos; El sabrá entendernos.
RAFAEL I : Estás loco Rafael, van a descubrirnos; Rafael van a ahorcarnos...
RAFAEL II: Ya basta Rafael! No nos queda mucho tiempo; hay que retomar los ensayos.
RAFAEL I : Y el cadáver?
RAFAEL II: Qué cadáver?
RAFAEL I : (Señalando hacia bastidores) Ese!
RAFAEL II: Eso es un maniquí (Se coloca el bonete)
RAFAEL I : Estás loco...
RAFAEL II: Es un maniquí del depósito Rafael. (Sale)
RAFAEL I : Rafael, adónde vas? Rafael, vení qué vas a hacer?! Rafael!!

Escena 12 (RAFAEL I, RAFAEL II – RAFAEL III)
(Aparece RAFAEL II abrazando el cadáver del cual se desprenden varios hilos a modo de marioneta. RAFAEL II aún lleva puesto su bonete, acomoda el cuerpo de RAFAEL III y -a través de los hilos- mueve los miembros del muerto.)
RAFAEL II: Bravo señores! Magnífica representación; son ustedes formidables! Bravo!, bravo!


(Carcajadas de RAFAEL II, lento apagón.)

Fin del acto 2

Acto Tercero.


Escena 1 (RAFAEL III, RAFAEL I)

(Se oye que alguien clava maderas entre bastidores. La escena se va poblando de luz muy lentamente, descubriendo a RAFAEL III estirado en el piso; y hacia uno de los costados, RAFAEL I atado y amordazado.)

Escena 2 (RAFAEL III, RAFAEL I, RAFAEL II )

(Entra RAFAEL II por el bastidor izquierdo cargando muchas maderas. Cruza el escenario hacia el bastidor derecho y sale por él. Nuevos golpes de martillo. Reaparece por el mismo lateral.)

RAFAEL II: Listo, ya están todas las puertas trabadas; nadie va a molestarnos ahora ( Va hasta el cuerpo de RAFAEL III y lo arrastra hacia el baúl, abre el mismo, lo vacía del vestuario, e introduce a RAFAEL III para cubrirlo con las telas y cerrar la tapa. Quedan las piernas afuera , trata de meterlas pero no puede. Da vueltas extenuado y se seca el sudor con el antebrazo) Esto se complica (Gemidos de RAFAEL I) Debemos pensar en algo rápido (Va hacia RAFAEL I y le quita la mordaza)
RAFAEL I : (Casi ahogado) Estás loco?! Cómo podes imaginar siquiera que vamos a salir de esta?
RAFAEL II: Calláte! No me pongás más nervioso; ya voy a pensar en algo. Negaremos haber venido a ensayar, no sé... diremos que no vimos a Rafael... Además, por qué tenemos que dar explicaciones? No hay nada que nos incrimine... nada!; me oís?! Nada! (Se pasea nervioso)
RAFAEL I : Y las maderas? Si alguien quiere entrar no podrá; cómo vas a explicarlo?
RAFAEL II: Diremos que estábamos cansados de las interrupciones y decidimos encerrarnos.
RAFAEL I : No van a creernos Rafael. Y si vienen a buscarlo? Si Rafael comentó a alguien que vendría?
RAFAEL II: Si vino y golpeó, no escuchamos nada, y seguramente al encontrarse con las puertas cerradas creyó no había nadie y se fue enseguida; eso diremos...
RAFAEL I : Vamos a ir a la cárcel... Nos pondrán presos y van a ejecutarnos por asesinos!
RAFAEL II: (Va hasta él y lo desata) Basta! Dejá de lloriquear!
RAFAEL I : Yo nunca estuve preso.
RAFAEL II: Escucháme Rafael: no pasa nada; me oís? Nada! Nadie va a poder entrar, nadie vio a Rafael; no hay sangre, no hay pruebas... Rafael no existe, nunca existió; entendés? Nunca!
RAFAEL I : Pero de qué hablás? Si está ahí: muerto; vos mismo lo pusiste en el baúl... Cualquiera que venga y lo abra podrá ver el cuerpo.
RAFAEL II: Ay, ay, ay, me sacás de quicio! Te repito que eso es un maniquí!
RAFAEL I : No empecés con tus juegos; lo único que querés es confundirme, pero no vas a lograrlo esta vez!
RAFAEL II: Por favor Rafael no te disperses y continuemos con el ensayo de una buena vez!
RAFAEL I : Después! Primero quiero saber qué hacemos con él.
RAFAEL II: Basta! Ya se habló demasiado del tema (Se coloca el bonete y comienza a accionar quebradamente, sin armonía. Abre la boca pero le es imposible emitir palabra)
RAFAEL I : Qué pasa?! No me asustés Rafael, qué tenés?!
RAFAEL II: Nada (Carraspea. Disimula) Nada solo… Es que me pusiste nervioso con tus preguntas. Me desconcentraste eso es todo. Vamos ponéte el bonete dale.

(Ambos se colocan su bonete y ocurre lo mismo que hace instantes: acciones torpes, mutismo, desorientación)

RAFAEL I : (Sacándose el bonete) Lo ves? Sabía que no podríamos lograrlo sin él, lo sabía, lo sabía. Qué vamos a hacer ahora?
RAFAEL II: (También se quita el bonete) Esperá, no te alterés…
RAFAEL I : Miserable! Fue tu culpa! Querías todo el mérito para vos solo, no es cierto?
RAFAEL II: No! Te juro que no es así!
RAFAEL I : Mentira! Ahora lo veo claro... Era esa tu simulación, pasar por tonto y al final alzarte con todos los méritos.
RAFAEL II: Rafi...
RAFAEL I : No me toqués. No te acerqués. Hipócrita, bestia salvaje...
RAFAEL II: Oíme, estás equivocado; yo puedo explicarte...
RAFAEL I: Querías saborear la muerte, no es cierto? Saber que se siente (Imitando a RAFAEL II)“ Ahhh, aún siento el latir de su cuello entre mis manos...” Ahh inmundo farsante; siempre jugando al pobre tonto que no entiende nada y al final...
RAFAEL II: Rafi no me tratés así, yo lo hice por vos, por nosotros.
RAFAEL I : Mentira! Lo hiciste por vos, nunca te importó nada más!
RAFAEL II: No! Sabés que eso no es cierto!
RAFAEL I : Nunca supiste ver mas allá de tu egoísmo.
RAFAEL II: Porqué me decís todo esto? Yo solo...
RAFAEL I : Siempre reclamando, nunca conforme; siempre más, más, más. Hasta dónde querés llegar?!
RAFAEL II: Pero...
RAFAEL I : Siempre devorándonos, siempre queriendo sobresalir a costa nuestra. Claro!, eras el actor, el admirado; el que gozaba de todos los beneficios...
RAFAEL II: Que compartía con vos, siempre lo hice, siempre estaba tu nombre junto al mío; por eso te propuse que volvieras a actuar, quería que sintieras lo mismo que yo.
RAFAEL I : Mentira! Mentira! Querías humillarme; querías hundirme en el desprestigio para resaltar aún más tu frágil figura de ser amable y tierno...
RAFAEL II: Pretendía que se conocieran todas nuestras facetas, que supieran que era posible.
RAFAEL I : Y lo arruinaste todo. La crítica destruyó al director; un golpe perfecto, una faceta menos, estrangulada; ya no causaría mas problemas... Cómo vas a justificarlo?
RAFAEL II: Que cosa?
RAFAEL I : Su desaparición; algo habrá que decir a la prensa.
RAFAEL II: De qué hablás?!
RAFAEL I : De Rafael hablo! Jamás vas a conseguir sacártelo de la cabeza.
RAFAEL II: El somos vos y yo. Rafael en sí no existe, nunca existió! Es un invento nuestro...
RAFAEL I : No!
RAFAEL II: Bueno ya me estás cansando con tus miedos estúpidos. La ficción, Rafael, en nuestros universos, es más fuerte que cualquier realidad que nos asignen; deberías saberlo. Tu fantasía es mi motor y son mis acciones las que reflejan tu imaginario. El ya no nos servía. Quería inmiscuirse en nuestras historias, modificarlas a su antojo, reducirnos a una simple etapa de su vida ya superada y olvidada y eso no puede ser, verdad? Yo no podía permitirlo.
RAFAEL I : Pero eso no justifica el crimen.
RAFAEL II: Sí! Si Rafael, es que no te das cuenta de que ahora somos libres para crear?
RAFAEL I : No Rafael; nos mutilamos, firmamos nuestra sentencia de muerte.
RAFAEL II: Quería borrar tus palabras, coordinar mis movimientos; se transformó poco a poco en un tirano que nos odiaba, o es que acaso no lo entendés? Su envidia fue tan lejos que no tuvimos otra salida, debía ser eliminado; era el o nosotros...
RAFAEL I : Y por eso lo mataste, para arrancarlo de cuajo de nuestras malditas existencias.
RAFAEL II: Y vos me ayudaste.
RAFAEL I : No tuve alternativa; me obligaste.
RAFAEL II: Ya no te justifiqués más por favor! Atosigarlo fue idea tuya, vos argumentaste que los únicos creadores ante el público seríamos nosotros; él también te molestaba, reconocélo!
RAFAEL I : No! (Se coloca el bonete y trata de accionar pero es inútil. RAFAEL II le quita el bonete)
RAFAEL II: Sí! Tenías miedo de él!
RAFAEL I : Si! Si, tenía pánico.
RAFAEL II: Querías detener el tiempo, ya no cambiar de rol; notabas como poco a poco te ibas transformando en él y a pesar de que el cambio te aterraba no te animaste y tuve que hacerlo yo, sí! Yo fui el arma asesina (Va hacia el baúl, lo abre e introduciendo sus manos en él revive lo que cuenta. Desesperación al no poder meter las piernas de RAFAEL III) Estas manos tomaron su cuello hasta el final, mis ojos fueron lo último que vieron los suyos, pero no te olvidés Rafael que vos me impulsaste a todo eso.
RAFAEL I : Qué vamos a hacer ahora? Estamos solos Rafael.
RAFAEL II: (Golpeando la tapa del baúl trata de romper las piernas de RAFAEL III que asoman inertes) Ahhh! Por Dios, vení a ayudarme o es que no ves que no entra?! Querés que nos descubran?
RAFAEL I : Dejá eso, es que no te das cuenta de lo que pasa? Nos equivocamos Rafael, ahora sin él jamás podremos realizar nuestra obra!
RAFAEL II: Por qué?
RAFAEL I : Porque rompimos la unidad, regresamos al caos.
RAFAEL II: No, ya vas a ver que no es así. Volvamos a intentarlo, retomemos el ritual (Se coloca el bonete e induce a RAFAEL I a imitarlo. Intentan accionar nuevamente pero tampoco esta vez pueden hacerlo. Tensión, muecas grotescas y una gran fuerza interna que parece desbordar a los actores que luchan contra la barrera de sus cuerpos sin dirección. Se arrancan sus bonetes desesperadamente y caen detrás del baúl. Sin que medie pausa se levantan RAFAEL II y RAFAEL III que encarna ahora al escritor. RAFAEL I quedará todavía oculto tras el baúl)

Escena 3 (RAFAEL III – RAFAEL II)
RAFAEL III: Es inútil, es inútil nunca vamos a conseguirlo, nunca!
RAFAEL II : Me aseguraste que podríamos lograrlo!
RAFAEL III: Te estás desbordando, eso no es bueno Rafael, debemos ser fríos y distantes.
RAFAEL II : Fríos y distantes? No comprendo.

Escena 4 (RAFAEL II – RAFAEL III – RAFAEL I)
(Ingresa RAFAEL I adoptando la postura y tonalidad de RAFAEL III cuando encarna al director, afianzando de este modo la idea circular de la obra)
RAFAEL I : No! No! No! Qué están haciendo ustedes con mi puesta?! Esto no es lo que yo marqué! Me engañaron! Tomaron mi diseño y no están logrando sino basura con él!
RAFAEL II : (Dando un alarido se aleja del baúl) Rafael! Es El! Estamos perdidos!
RAFAEL III: Esperá no te alteres. Pero cómo es posible?
LOS TRES: No se puede detener el proceso. Siempre se evidenció en Rafael al nuevo ser.
RAFAEL II : Es el momento justo para cortar la cadena.
RAFAEL III: Pero entonces no importa el precio? Estoy tan confundido... Tengo miedo de seguir (Mirando a ambos) Quien soy?
RAFAEL II: (Gira enfrentando al público) Quien soy?
RAFAEL I : (Misma Acción) Quien soy?
LOS TRES: (De frente al público) Ya todo se acerca al desenlace y cualquier decisión que tomemos será la correcta.
RAFAEL III : Nunca podremos realizar nuestros sueños.
RAFAEL I : No Rafael, no lo escuchés!
RAFAEL III: Siempre yendo hacia la nada, cayendo cada vez que abríamos la puerta exacta…
RAFAEL I: Ustedes se descontrolan! Esta puesta será un desquicio si no acatan mis órdenes.
RAFAEL III : Se puede callar la boca?!
RAFAEL I: Un momento, no le permito…
RAFAEL II : (Le grita a coro con RAFAEL III) Gusano, gusano engreído! (Lo toma del cuello y lo asfixia para arrojarlo luego dentro del baúl)

Escena 5 (RAFAEL III – RAFAEL II)
RAFAEL III: No entiendo… Todo es tan difícil…
RAFAEL II : (Agitación. Ansiedad. Se repite la sensación de la primera muerte) Si pudiéramos volver a empezar…
RAFAEL III: (Ansioso) Claro que es posible!
RAFAEL II : Me gustaría que eso fuera cierto. Podemos ensayar nuevamente el ritual?
RAFAEL III: Ahora?
RAFAEL II : Y por qué no?
RAFAEL III: No lo sé.
RAFAEL II : Te asusta?
RAFAEL III: Tal vez.
RAFAEL II : No tengas miedo.
RAFAEL III: Por qué?
RAFAEL II : Nada va a pasarnos.
RAFAEL III: Cómo podes saberlo?
RAFAEL II : Lo sé. Simplemente lo sé y eso es lo que importa.
RAFAEL III: Sí, eso es lo que importa.
RAFAEL II : Empezamos?

(Giran. Se colocan el bonete y –al intentar retomar el ritual- nuevamente sucede la ruptura del tríptico, ya que al faltar el director los movimientos y la palabra están descontrolados. Caen detrás del baúl y se elevan RAFAEL II y RAFAEL I)

Escena 6 ( RAFAEL I – RAFAEL II)
RAFAEL I : Estamos atrapados en un círculo vicioso. Jamás podremos escaparnos de nuestras miserias.
RAFAEL II : Tengo ganas de besarte Rafael.
RAFAEL I : Estoy tan solo Rafael… Es como si me despegara de mi mismo a una gran velocidad y, desde lo alto, me viera perdido en un desierto oscuro; solo un punto en la inmensidad, un niño perdido y desesperado.
RAFAEL II : Escuchá lo que haremos: vamos a ir hasta la ribera a buscar a esos árboles que tanto me gustan; y cuando hallemos al más hermoso de todos, me harás pie para que suba y te estire mis manos y así juntos podremos treparnos al árbol más frondoso de la costa y entonces, una vez arriba, desde lo alto, veremos el atardecer junto al río.
RAFAEL I : (Sueña que es niño otra vez) Y contaremos las estrellas reflejadas en el agua, y temblaremos de frío el uno junto al otro soñando los mismos sueños.
RAFAEL II : Y cuando todo sea silencio, cuando la luna nos decolore con su blanco, cuando el rocío unte nuestros cabellos, recién entonces Rafael, recién entonces seremos uno (Pausa. Se miran largamente a los ojos) Puedo besarte ahora? ( Silencio. Pausa. Se besan. Se miran de una manera indescriptible. Bucearan en ellos mismos, y cuando sus ojos no basten, se fundirán en un único abrazo, el último abrazo)
RAFAEL I : No comprendo Rafael. Todavía siento la angustia. Todavía siento esta opresión en el pecho.
RAFAEL II : Un artista Rafael, un artista que dominado por una pasión intenta vencer sus barreras.
RAFAEL I : Pero eso no es posible Rafael. Sus temores lo llevarán siempre hasta donde lo esperan todas esas puertas. Qué camino tomar? Cuál es el correcto? Solo uno conoce. Solo uno lo atrae irremediablemente.
RAFAEL II : Quiero retomar los ensayos, aún hay cosas por dilucidar.
RAFAEL I : De qué nos serviría entenderlas? Sin la dirección no es posible representar nuestra obra.
RAFAEL II : Confiemos en nuestra memoria. Vamos hay que hacer un esfuerzo (Se colocan ambos sus bonetes y ante la imposibilidad de acción se repite la coreografía de movimientos amorfos. Caen exhaustos detrás del baúl y se incorporan RAFAEL II y RAFAEL III. Emiten los parlamentos de la siguiente escena de manera neutra. Inmovilidad de ambos actores. Esta escena transcurre en el interior de sus mentes. Es el deseo de representar reprimido lo que se hace evidente al espectador)

Escena 7 ( RAFAEL II – RAFAEL III)
RAFAEL II : Ha pasado mucho tiempo verdad camarada?
RAFAEL III: Cómo es posible que me haya encontrado?
RAFAEL II : No ha sido fácil Levin, en verdad que no. Pero sabe una cosa? El odio y la venganza se hermanan con la paciencia cuando uno es traicionado. Solo hay que esperar el momento justo para dar el zarpazo final, ese golpe deseado por tanto tiempo.
RAFAEL III: Usted debe comprenderme camarada…
RAFAEL II : Camarada? Resulta que ahora he vuelto a ser su camarada Levin? Que bajo nos arrastra el miedo, no es cierto?
RAFAEL III: No me quedó otra salida; ya todo aquello se desmoronaba…
RAFAEL II : Y abandonó el barco como las ratas? Qué repugnante! Sabe Levin usted es peor que yo, su falso arrepentimiento jamás llegué a creérmelo.
RAFAEL III: Por favor, encontrémonos en otro sitio; no se como supo mi dirección, pero aquí no podemos hablar mi familia…
RAFAEL II : Su familia está de viaje. Piensa que no cuidé todos los detalles después de tantos años?
RAFAEL III: Qué quiere, dinero? Puedo darle lo que me pida…
RAFAEL II : Desde que me denunció fantaseé con este instante, se lo dije aquella maldita tarde que pagaría por su traición y acá estoy Levin, ya no me importa nada. Todo llega, y usted era uno de los nuestros… Debe pagar su traición!
RAFAEL III: Por favor no lo haga. Estoy viejo, no me queda mucho tiempo de vida… Piense en mi familia, ellos no tienen la culpa.
RAFAEL II : (Con una carcajada) No aguardé todos estos años de búsqueda para dejarme convencer por sus lamentos ( Levin saca un arma, pero es sorprendido por su oponente que se le adelanta y le dispara. Breve apagón. Luz. RAFAEL II de frente al público parece despertar de un sueño epifánico. Abre los ojos y emite su monólogo)

Escena 8 (RAFAEL II)
RAFAEL II: Así debió ser al principio... Todo está tan infinitamente relacionado con todo... Por qué es tan difícil reconocer lo importante en el preciso momento en el que transcurre? Si pudiera entenderlo, si tuviera todas las respuestas a mis enigmas... Ay! que dolor; mis otros yo han perecido bajo mi propio yugo y arrancaron mi piel en su partida... Me abrieron en pedazos, me dejaron tan expuesto... Una multitud de facetas confabuladas en mi contra se elevaron conformando un gran dedo índice que señalaría mi camino, y sus voces quebradas, armónicas, viejas y suaves, jóvenes y opacas, severas y dulces como oboes me nombraron: actor, actor, actor...

Escena 9 (RAFAEL II, RAFAEL I , RAFAEL III)
(Se abre la tapa del baúl y sale de su interior RAFAEL I. Todo el escenario se tiñe de un color azul intenso. Escena de total irrealidad. RAFAEL I se acercará, tomará el cuerpo de RAFAEL III y lo sentará en la silla del proscenio e irá luego a acomodarse sobre el baúl como al comienzo de la obra y desde allí reiniciarán el ciclo)

RAFAEL II: Hola! Hace mucho que esperás?
RAFAEL I : Que espero qué?
RAFAEL III: (A RAFAEL I) Hola! Hace mucho que esperás?
RAFAEL II: (A RAFAEL I) Lo que esperás.
RAFAEL I : (A RAFAEL III) Que espero qué?
RAFAEL III: (A RAFAEL I) Lo que esperás.
RAFAEL I : (Inmutable. Fijo de frente al público) No lo sé.
LOS TRES: (Mirando a la platea. Imagen fija.) Yo soy...

(Lento apagón que irá cubriendo las últimas frases de los actores. Se oye una cajita de música.)



Fin del Acto Tercero

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Joaquín Gómez. E-mail: guijote@hotmail.com